Bicarbonato: 3 maneras de usarlo en la mañana para producir colágeno

Así es como puedes utilizar este versátil ingrediente de cocina

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En la búsqueda constante de hábitos saludables, el bicarbonato de sodio emerge como un elemento versátil, además de beneficioso cuando se trata de impulsar la producción de colágeno, una proteína esencial para la salud de la piel. Aquí presentamos tres maneras de incorporarlo en tu rutina de belleza matutina.

¿Cómo usar el bicarbonato para producir colágeno?

1. Exfoliante facial

Comienza tu mañana con un suave exfoliante facial a base de bicarbonato para estimular la circulación sanguínea y eliminar células muertas de la piel. Mezcla una cucharadita de este elemento con agua hasta obtener una pasta ligera. Masajea suavemente el rostro con movimientos circulares, prestando especial atención a áreas propensas a líneas de expresión. Enjuaga con agua tibia. Este proceso ayuda a preparar la piel para absorber mejor los nutrientes o favorece la regeneración celular, contribuyendo indirectamente a la producción de colágeno.

2. Bebida alcalina

Prepara una bebida simple combinando ½ cucharadita de bicarbonato de sodio con agua tibia y añade unas gotas de limón fresco. Esta mezcla alcalina puede ayudar a mantener un pH equilibrado en el cuerpo, lo que se ha relacionado con una mayor eficiencia en la producción de colágeno.

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¿Cómo usar el bicarbonato para producir colágeno? Foto: Freepik

3. Mascarilla capilar

Combina bicarbonato de sodio con tu acondicionador o aceite capilar favorito para crear una mascarilla rejuvenecedora. Aplica la mezcla en el pelo y cuero cabelludo, dejándola actuar durante unos 15 minutos antes de enjuagar. Este ingrediente de cocina puede ayudar a eliminar residuos acumulados en el cuero cabelludo o restaurar el equilibrio.

Bicarbonato: 3 maneras de usarlo en la mañana para producir colágeno. Foto: Freepik

Es importante destacar que, aunque el bicarbonato de sodio ofrece beneficios potenciales para la producción de colágeno, su uso debe ser moderado y adaptado a las necesidades individuales de cada persona. Consultar con un profesional de la salud es fundamental, especialmente si se tienen condiciones médicas preexistentes. Incorporar estas prácticas con sensatez puede contribuir a una rutina matutina que promueve la salud a largo plazo.

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Karen Luna

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