Rutina de skincare coreano: 4 pasos para lograr una piel de porcelana

Conoce esta rutina de skincare coreano de 4 pasos para obtener una piel de porcelana. Te contamos cómo hacerla.

El skincare es tendencia, pero no podemos ignorar sus efectos sobre nuestra piel para ayudarnos a eliminar toda especie de imperfecciones de ella y darle una apariencia agradable, suave y tersa. Las coreanas son las reinas de cuando skincare se trata, por eso te compartimos esta rutina de skincare coreano para lograr una piel de porcelana.

Rutina de skincare coreano

1. Tónico

Comenzamos la rutina de skincare con nuestro rostro limpio para aplicar productos que lo mantengan hidratado y evite el brote de cualquier tipo de imperfecciones. Para este paso ese necesario que uses tu tónico facial, ya que te ayudará a refrescar, hidratar y a regular el pH de tu piel, pues recuerda que cuando este se ve alterado el cutis se ve afectado mostrando resequedad e irritación.

El tónico fácil te ayudará cerrar los poros y a preparar tu piel para los siguientes productos vayas a usar. Hay dos métodos para aplicar el tónico facial: el primero, es aplicándolo en tu rostro y expandirlo por él usando tus manos ejerciendo presión con golpecitos suaves. El segundo método se basa en el uso de un algodón humedecido con el tónico, aplícalo con toquecitos por tu rostro. Nunca frotes.

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2. Sérum

El siguiente paso es usar sérum, en el mercado puedes encontrar una gran diversidad de opciones con diferentes vitaminas y activos para tu piel, escoge de acuerdo a las necesidades de tu piel. El sérum es un producto que penetra las capas más profundas de la piel ayudando a su hidratación.

Estos productos se presentan con un aplicador tipo gotero deja caer una gota del producto sobre tu rostro y con la punta de tus dedos expande el producto con pequeños golpes. Incluso puedes ponerlo en las palmas de tus manos para calentarlo y presionar sobre tu rostro. Recuerda mantener el aplicador alejado de tu piel.

3. Crema humectante

Para este paso usaremos crema facial, la cual no debes de confundir con crema corporal, pues sus propiedades son distintas y no te darán los mismos beneficios que aquellas que están dedicadas para el tratamiento del rostro. Con este producto vamos a sellar la hidratación hecha previamente y a humectar el rostro.

Aplica la crema en puntos estratégicos en tu piel, pon una gota en tu frente, otra en cada una de tus mejillas, en tu barbilla y por último en tu nariz. Expande este producto frotándolo con suavidad poniendo atención en cada zona para esta esté bien humectada.

4. Bálsamo labial

Por último no podemos olvidar nuestros labios, pues estos son delicados y necesitan atención debido a que con los cambios de clima tienden a resecarse. Así que aplica bálsamo labial en ellos para mantenerlos hidratados y ¡listo! Realiza esta rutina en las noches para lucir una piel tersa, si la haces por la mañana agrega a esta rutina el uso de protector solar y aplicado de forma similar a la crema humectante.