Despídete de las patas de gallo: Prepara este aceite antiarrugas de 2 ingredientes

Hay muchos tips y productos para deshacerte de las arrugas de distintas partes del cuerpo. Sin embargo, una de las más comunes, y más molestas, son las patas de gallo. Para la suerte de muchos, puedes preparar un aceite con tan solo dos ingredientes.

Recuerda que el ser contante te ayudará a obtener los mejores resultados en tu cutis y rejuvenecer hasta 10 años. Las mascarillas y el buen cuidado de la piel le darán un glow up a tu piel, pues se verá hidratada y libre de las temidas líneas de expresión.

¿Cómo eliminar las patas de gallo?

Para preparar este aceite vas a necesitar unas cuantas hojas de aloe vera, tienes que dejarlas reposar en agua por 48 horas. Luego las vas a lavar y picarlas, para sacarles toda la “baba” que es lo que necesitamos usar.

Una vez que la hayas despegado por completo de la hoja lo vas a pasar a una licuadora hasta que quede una especie de líquido que vas a colar para eliminar los grumos. A esta mezcla, le agregas la misma cantidad de aceite de oliva.

Cuando tengas la preparación lista lo vas a poner a hervir a fuego lento por 3 horas, cuidando que el aceite de oliva no hierva. Cuando se enfríe ya está listo para ponerlo en tus patas de gallo.

¿Por qué se forman las patas de gallo?

Las patas de gallo son pequeñas arrugas de expresión que se forman en los extremos de los ojos según vamos envejeciendo. Se deben a la repetida contracción de los músculos que se encuentran debajo.

Esta tensión tira de la piel, formando surcos cada vez más profundas según pasa el tiempo. Generalmente, este tipo de líneas de expresión suelen ser las primeras en visibilizarse.

Además, al estar en una zona sin apenas glándulas sebáceas, es más fácil que la piel del contorno de ojos se encuentre deshidratada y necesite un extra de hidratación. Mantenerla hidratada ayuda a retener el agua dentro de la dermis y a reducir la aparición de las patas de gallo.

Sin embargo, su aparición puede tener origen en varias razones:

● Pérdida y degradación de colágeno y elastina.

● Cansancio y falta de sueño.

● Estrés.

● Rutina de higiene facial inadecuada.

● Piel deshidratada.

● Sobreexposición al sol.

● Fruncir el ceño frecuentemente.

Las arrugas son algo totalmente natural, sin embargo hay bioestimuladores de colágeno para combatir el envejecimiento. Nunca es tarde para comenzar a cuidar de ti y de tu piel.