¿Qué hacer si tienes la barrera cutánea dañada? 5 hábitos que debes cambiar ya

Seguramente has escuchado sobre la barrera cutánea, es decir, una cobertura natural que protege tu piel de agentes externos. Para tener una piel lisa, sin imperfecciones y sin arrugas, es fundamental cuidar el cutis y es por eso que aquí te decimos 5 hábitos que debes cambiar si tienes la barrera cutánea dañada.

¿Qué es la barrera cutánea?

La barrera cutánea es una capa natural de la piel que la protege de agentes externos como la contaminación, los rayos solares, entre otros. Asimismo, ayuda a mantener la humedad y la hidratación en el cutis. En la cultura de belleza coreana se enfocan en proteger y restaurar la barrera cutánea, pues es el primer contacto que tiene tu piel con el exterior.

¿Cómo saber si tengo la barrera cutánea dañada?

Si tu barrera cutánea tiene daños podrías experimentar los siguientes síntomas:

• Sequedad: la piel seca y escamosa con picazón son signos de deshidratación y falta de humedad, por lo que es uno de los síntomas que indican que tu barrera cutánea tiene daño.
• Sensibilidad: si tu piel se enrojece o se irrita fácilmente, aún utilizando productos adecuados para tu piel, es posible que debas reparar tu barrera cutánea, pues no está cumpliendo la función de proteger tu dermis.
• Inflamación: las manchas rojas, piel inflamada, sensación de calor e hinchazón en ciertas zonas del rostro podrían ser causa de la barrera cutánea dañada.
• Acné: al tener la barrera cutánea dañada, es más probable que la piel esté expuesta a bacterias como la que causa el acné.
• Descamación: si notas que tu piel desprende células muertas con facilidad o al acercarte notas pequeños pellejitos sobre todo tu rostro, es muy posible que tengas la barrera cutánea dañada.

Malos hábitos que dañan la barrera cutánea

Usar productos de skincare agresivos con la piel

Si ya tienes una rutina de skincare, pero notas que tu piel sigue viéndose deshidratada, es probable que los productos no sean los adecuados para tu tipo de piel. Elige aquellos que tengan ingredientes que ayudan a reparar la barrera cutánea como niacinamida o pantenol. Asimismo, evita activos como el retinol o la vitamina C, ya que son más agresivos con la piel y podrían aumentar el daño de la barrera del cutis.

No hidratar la piel correctamente

La hidratación es fundamental para reparar la barrera cutánea dañada; si no sueles utilizar cremas hidratantes, es el momento que lo hagas. Asimismo, si no te gusta tomar agua, recuerda que la hidratación de las células viene desde adentro, por lo que mantenerte hidratada con agua todo el día es fundamental para lucir una piel de porcelana.

No usar protector solar

Si tienes la barrera cutánea dañada es crucial que utilices protector solar, ya que al carecer de esa capa protectora podría causarte manchas en la cara que incluso podrían representar melanoma o cáncer de piel. Elige un protector solar de 50 fps para cuidar tu rostro y evitar que los rayos solares dañen tu piel.

Exfoliar el rostro

Al tener la barrera cutánea dañada es posible que veas un exceso de células o piel muerta en tu rostro, sin embargo, un grave error es exfoliar la piel creyendo que eso eliminará el problema, pues en realidad solo lo harás más grande. Si exfolias la piel con frecuencia, estarás eliminando la barrera protectora y podría aumentar la sequedad y descamación en el rostro.

Si notas alguno de los síntomas de la barrera cutánea dañada, te recomendamos acudir con tu dermatólogo para que te indique cuál es el mejor tratamiento para ti. Asimismo, sigue protegiendo tu piel con protector solar e hidratación, pues es la forma más fácil y efectiva para conseguir un rostro de porcelana.