3 aceites naturales multiusos para una piel sin arrugas y un cabello sedoso al mismo tiempo

Aprovecha las propiedades de cualquiera de estos 3 aceites naturales que pueden aportar grandes beneficios rejuvenecedores para tener una piel de porcelana y un cabello saludable con un solo producto.

¿Te gustaría que pudieras mantener una piel y cabello radiante con un mismo producto? Pues esto es posible, pues solo debes aprovechar alguno de los 3 aceites naturales que te compartiremos a continuación para lograr borrar las arrugas, nutrir tu piel y fortalecer tu cabello.

Lo mejor de todo es que además de ahorrar tiempo y dinero, estarás usando ingredientes naturales que aportan mayores beneficios a la piel y el cabello, dejando de lado los productos de belleza químicos que se encuentran en gran cantidad de productos del mercado.

¿Qué aceites puedo usar para cuidar la piel y el cabello?

Si lo tuyo es la practicidad que puedes encontrar en un mismo producto que pueda ser usado en cara, cuerpo y cabello, amarás cualquiera de estos 3 aceites naturales que te compartimos, pues además de encontrarlos a precios económicos, incluso en los de mayor tamaño, cada uno de ellos cuentan con grandes propiedades que benefician a tu piel y melena ayudándoles a mantener su luminosidad y juventud de manera natural.

1. Aceite de coco

Si buscabas un producto que puede hacer de todo, es el aceite de coco, no por nada es conocido como un todoterreno en el hogar, pues además de ser beneficioso en la cocina, en al belleza también tiene grandes aportes.

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Como es rico en ácidos grasos y antioxidantes, este aceite no solo hidrata, sino que también protege y repara brindando una hidratación profunda, inclusive en las pieles secas y agrietadas. Además, es uno de los grandes en cuanto a combatir el envejecimiento, pues cuenta con grandes propiedades antioxidantes que combaten los radicales libres ayudando a retrasar la aparición de arrugas y manchas, y si llegas a tener tu piel irritada, este te ayudara a brindar ese efecto calmante que necesitas.

Cuando lo aplicamos en el cabello, el aceite de coco es beneficioso para sellar las puntas abiertas y fortalecer cada hebra, lo que se traduce en una melena suave y llena de brillo. Además es muy beneficioso si te expones muy seguido al sol y contaminación, pues este aceite crea una barrera que protege a tu cabello de estos daños externos.

Si quieres comenzar a incorporarlo en tu rutina de belleza, solo basta con aplicar directamente un poco sobre el cabello a forma de mascarilla capilar y dejarlo reposar al menos 30 minutos antes de enjuagar. en la piel es mejor aplicar una ligera capa sobre el rostro antes de irte a dormir, para dejarlo actuar toda la noche y enjuagar a la mañana siguiente.

2. Aceite de argán

Este aceite, mejor conocido como “el oro líquido”, el aceite de argán originario de Marruecos, es sin duda un lujo que tu piel y tu cabello agradecerán, pues este aceite es famoso tiene la capacidad de hidratar ambos sin dejar residuos grasos.

Así que si pensabas que era exclusivo del cabello, te equivocas, pues además de reparar el cabello maltratado, eliminar el frizz y reducir su caída, también puede aportar grandes beneficios a la piel, sobretodo cuando de mejorar la elasticidad, retrasar signos de envejecimiento y suavizar cicatrices se trata.

Para usarlo, solo basta con aplica un par de gotitas en tus manos y pasarlas sobre las puntas de tu cabello o mezcla con tu crema hidratante para un boost extra de nutrición.

3. Aceite de oliva

Otro aceite poderoso, que solemos encontrar en la cocina pero es una gran aliado de belleza, es sin duda, el aceite de oliva. Gracias a su alto contenido en vitamina E y ácidos grasos lo hace perfecto para el cuidado diario.

Entre los beneficios que le aporta a la piel es que brinda una hidratación intensa, perfecta para combatir lineas de expresión por deshidratación, o incluso suavizar la piel de zonas a menudo muy secas como lo son los codos y rodillas. Además cuenta con múltiples antioxidantes que previenen el envejecimiento prematuro, revelando una piel suave, luminosa y rejuvenecida.

En cuanto al cabello, ayuda a nutrirlo desde la raíz a puntas devolviéndole el brillo y sedosidad que se merece, además es perfecto para controlar el frizz de las melenas.

Para usarlo y aprovechar todas sus propiedades, puedes usarlo como mascarilla capilar junto con miel o aplícalo en la piel húmeda después de la ducha, y en cuanto a la piel aplicarlo directamente o con un pedazo de algodón.