El intraemprendimiento y todo lo que necesitas saber sobre él

El concepto llama la atención y no sólo por su estructura lingüística, sino por todo el significado que conlleva y la gran transformación empresarial que ha generado. Y no, el concepto no es nuevo, desde finales de los años 70 se empezaba a gestionar la idea de promover la iniciativa de los propios empleados en grandes corporaciones con el fin de solucionar problemas internos, sin la necesidad de hacer contrataciones externas que generaran un incremento de costos.

Y así es como el intraemprendimiento logró posicionarse, de la mano Gifford Pinchot, como uno de los conceptos claves para experimentar a base de ideas y procesos, tomando proyectos existentes y mejorándolos con tal de generar resultados efectivos. Se trata, sobre todo, de innovar, atreverte a levantar la mano y desafiar aquello que “siempre se ha hecho” con el fin de generar nuevas soluciones. Todo dentro de tu misma empresa.

La innovación y el intraemprendedor

El proceso de innovación de cualquier negocio va más allá de los avances tecnológicos y las ideas que puedan generarse a partir de éstos, y es que antes de enfocarse en términos de un visionario, este concepto tiene que ver con proyectos factibles, realizables, viables económicamente y que promuevan un cambio en los procesos.

En intraemprendimiento juega y se mantiene cerca de la eficiencia; sin embargo, también promueve la creatividad e iniciativa de los propios empleados que, poniendo de manifiesto sus talentos e inquietudes, logran generar cambios impactantes dentro de la organización.

Así es como el intraemprendedor, en lugar de inventar el hilo negro, logra consolidar una serie de soluciones al problema con el que convive diariamente y que conoce mejor que nadie, con ello se anticipa a satisfacer las necesidades de los consumidores sin la necesidad de hacerlo hasta que surjan las famosas quejas.

La transformación de los procesos en el intraemprendimiento

Si existe un objetivo que se tiene que cumplir es el siguiente: entender los modelos que existen hasta ahora en la empresa (cualquiera que sea su giro) y mejorarlos.

Lo más importante para lograr cambios desde la raíz está en la creatividad y el ingenio para saber cómo aplicar dichas transformaciones a toda la empresa. Generar un espíritu de iniciativa es la mejor manera para que los empleados se sientan integrados y en un equipo que reconozca sus esfuerzos y los ponga en acción.

Ha sido tan importante la integración del intraemprendimiento que, desde hace 15 años, las mismas empresas han generado sus propios departamentos de innovación que tienen como meta generar las ideas correctas para lanzar sus nuevos productos.

Aunque hasta hace algunos años la comunicación premiaba las ideas del equipo de directores para encontrar soluciones, ahora se buscan perfiles idóneos que puedan cumplir con este papel en específico.

¿Cómo identificar a un intraemprendedor?

• Se atreven a arriesgarse. La mayoría de los empleados están casados con la idea de cumplir órdenes, pero el intraemprendedor asume responsabilidad, iniciativa y sale de la caja.
• Tienen una gran capacidad de iniciativa. El intraemprendedor, más que enfocarse en los problemas, se interesa en buscar soluciones constantes e innovadores para los mismos.
• No buscan remuneración económica, sino reconocimiento. Sus propuestas generan un mayor sentido de pertenencia y entrega con la organización para “traer bien puesta la camiseta”.
• Buscan impactar. Tienen como meta ser agentes de cambio en todos los escenarios en los que se desempeñen, por lo que su mente siempre trabaja para tener una nueva visión de su misma empresa.
• Logran adaptarse. Ningún escenario es complejo, sino retador. El intraemprendedor desea innovar, trabajar con base en la creatividad y buscar soluciones siempre.

Los pilares básicos del intraemprendimiento

1. Nunca es suficientemente perfecto un proceso. Entender que siempre habrá áreas de oportunidad es vital para generar una búsqueda de soluciones innovadoras, un básico en mentes emprendedoras.
2. Las quejas deben cambiarse por propuestas. Encontrar distintas soluciones a un problema es fundamental. Eso hace que tu opinión no sólo se agradezca, sino que siempre tengas la seguridad de que tendrás la atención de tus clientes por anticiparte a sus necesidades.
3. Hacer propuestas con responsabilidad y seriedad. Tomarse en serio y hacer una investigación previa, tomando en consideración los aspectos técnicos y financieros que ayudarán a resolver el problema o generar cambios en los procesos. Las ideas aterrizadas y factibles siempre se agradecerán.
4. No conformarte con lo que tienes. Aunque los problemas se hayan resuelto de forma histórica de una manera, eso no quiere decir que puedas justificarte en los problemas y en la poca eficiencia. Salir de tu zona de confort, tener ojo crítico y saber cómo puedes impactar son características básicas de un buen intraemprendedor.

Los pros del intraemprendimiento

1. La tecnología ha creado una cercanía impresionante con los clientes y cada vez resulta más fácil publicar opiniones al respecto de servicios en redes sociales. Este concepto genera y agradece la presencia de mentes ágiles que se anticipen a resolver los problemas con el fin de satisfacer al cliente.
2. Para las grandes empresa ha representado un reto, pero son éstas mismas las que han diseñado áreas de innovación en las que se realizan pruebas metodológicas para implementar los cambios en los procesos sin sufrir grandes alteraciones económicas. A la larga, estas acciones prometen la mejora en la calidad de todos los productos y sus procesos de logística.
3. Para las pequeñas y medianas empresas, que aun están en un proceso de aprendizaje, el intraemprendimiento las invita a estar en un camino de mejora continua y a tener mayor flexibilidad para realizar los cambios pertinentes desde dentro. Gracias a eso, su crecimiento es avanzado y sus tiempos de ejecución son más rápidos.
4. Tener un equipo de intraemprendedores funciona como una consultoría interna de miembros que conocen de primera mano los problemas a los que se enfrenta la empresa y que sabe cómo resolverlos. Esto lo que genera es que todo el equipo se sienta motivado y en una entrega total.

Los retos del intraemprendimiento

1. Para que este concepto pueda ser una realidad, las empresa deben hacer lo siguiente:
2. Estar dispuestas a tener grupos de innovación dentro de sus corporativos
3. Tener humildad para asumir el riesgo de los cambios y afrontarlos con seguridad
4. Abrir espacio para que los mismos empleados generen ideas que mejoren los procesos
5. Ser un semillero de talento que esté dispuesto a compartir el talento y, sobre todo, reconocerlo

Está muy de moda emprender, pero siempre surge el estrés y el nerviosismo de todos los cambios que vienen con ello. Empezar a intraemprender significa poner en práctica todas las habilidades que requiere un empresario para generar proyectos que funcionen, impacten y se mantengan en una mejora constante.

Parece que el secreto es, y seguirá siendo, el mismo: trabajar en equipo como la solución a los cambios que, sí o sí, cualquier empresa deberá afrontar.

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