¿Cómo hacer una composta para plantas de interior con restos de té y café? (Paso a paso)

Haz que tus plantas de interior luzcan espectaculares con este abono casero.

¿Sabías que puedes hacer tu propia composta en casa? Así como lo lees, tus plantas de interior pueden impulsar su crecimiento con un abono casero hecho restos de té y café. Por lo que, si quieres que tu rincón verde luzca increíble, aquí te diremos cómo hacer una composta con algunos ingredientes de tu cocina.

La composta es una forma muy fácil y ecológica de fertilizar las plantas, pues se genera un abono natural con materiales orgánicos que le aportan los nutrientes necesarios a las plantas para desarrollarse correctamente.

¿Cómo hacer una composta?

Para hacer una composta se requiere de desechos orgánicos como los restos de té o café, pues además estas bebidas contienen múltiples nutrientes y vitaminas que promueven el crecimiento de las plantas. Si quieres hacer una composta en casa, te recomendamos separar otros materiales orgánicos como cáscara de huevo o de verduras.

Materiales:

Cubeta
Desechos orgánicos
Hojas secas
Tierra

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Procedimiento:

Haz pequeños orificios a la cubeta en la parte de abajo y alrededor.
Coloca una capa de hojas secas de 30 centímetros de altura.
Agrega los desechos orgánicos como los restos de café o té.
Alterna y coloca más capas de hojas secas.
Riega la composta cada que se seque por completo.
Coloca la composta en un lugar con sombra.
Remueve la composta una vez cada semana para mezclar los materiales.
Agrega tierra y hojas secas si notas que la composta está muy húmeda.

Una composta puede tardar de dos a cinco meses en hacerse y la mejor señal para saber que tu abono está listo es si notas que tiene un color café oscuro, similar al de la tierra. Cuando obtenga esta tonalidad, podrás agregar esta composta a tus plantas de interior para aprovechar todos sus beneficios.

¿Cómo usar el té y el café como abono para plantas?

Una forma más sencilla de usar los restos de té y café es enterrar el sobrante en la tierra de tus plantas. Solamente coloca los restos de tu café o bolsas de té a algunos centímetros de profundidad de la maceta y notarás que en poco tiempo tus plantas aprovechan sus nutrientes como abono para crecer rápido.