Plantas de interior: 4 errores al cuidar y cultivar Cuna de Moisés que SÍ la marchitan y no florece

Tu planta crecerá bonita y más rápido si sigues estos consejos.

¿Conoces la Cuna de Moisés? Seguramente sí. Esta planta de interior es perfecta para tener dentro de la casa, ya que no le agradan los rayos solares. Pese a que es una especie sencilla de cuidar y cultivar, algunas personas enfrentan complicaciones para mantenerla viva. Si no quieres que esto, te pase detecta los 4 errores más comunes que la marchitan y hacen que no florezca. ¡Apúntalos todos!

La Cuna de Moisés es la planta que le hace falta a tu hogar: además de tener una flor muy hermosa, esta especie purifica el aire de los espacios y mantiene un clima agradable, por lo que es ideal en temporadas de calor como primavera y verano. La Cuna de Moisés es fácil de cuidar y le da un toque elegante y especial a la sala, comedor y cocina. Para que también la incluyas en la decoración, te diré los 4 errores que provocan que se marchite y muera.

¿Qué significado tiene la Cuna de Moisés?

La Cuna de Moisés simboliza la inocencia y la pureza del alma, por los tonos blancos de la flor. El Feng Shui señala que dicha planta de interior ayuda a mantener alejada la energía negativa.

¿Cuánto llega a medir la Cuna de Moisés?

La planta de interior Cuna de Moisés cultivada en maceta puede alcanzar una altura de 70 centímetro de alto por 50 de ancho; considera estas medidas para que elijas el lugar adecuado para ella.

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¿Cómo hacer para que florezca la Cuna de Moisés?

Para que tu Cuna de Moisés florezca debes darle los nutrientes necesarios, es decir, a su tierra agrégale abono, sobre todo, a principios de primavera o verano, que es cuando más necesita de atenciones.

Errores más comunes al cuidar la Cuna de Moisés

-Falta de espacio: como verás, es una planta grande, así que considera macetas con el espacio suficiente para que sus raíces crezcan.

-Riego insuficiente: si bien, debes cuidar no encharcar tu Cuna de Moisés, esta planta necesita estar húmeda la mayor parte del tiempo. Si la riegas 2 o 3 veces a la semana evitarás que se marchite y no florezca.

-Hojas sucias: es importante mantener impecable a dicha planta de interior porque el polvo le afecta. Límpiala una vez a la semana y notarás el cambio.

-Poca iluminación: Si bien a la Cuna de Moisés no le hace bien el sol, sí necesita de un espacio con suficiente iluminación para florecer y no marchitarse.