¿Cuál es la etapa más triste de la vida? Esta es la edad en donde somos más infelices, según la ciencia

Los sentimientos son tan complejos y únicos como cada persona que existe y los sufre, pero sin duda la sensación de tristeza es conocida por la mayoría de las personas en el mundo, después de todo cada etapa en la vida está llena tanto de cosas buenas como de negativas. Pero también es verdad que existe algún momento durante nuestro desarrollo, donde simplemente pareciera que las cosas se complican cada vez más sin importar cuánto esfuerzo o tiempo invirtamos.

Según un artículo publicado por la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el ya conocido sentimiento de vacío que algunas personas llegan a experimentar, se intensifica a partir de cierta edad. La conclusión a la que llegó el experto David Blanchflower te sorprenderá, pues esta puede ser la explicación del por qué parecería que hay personas más infelices, que otras.

¿Por qué siento que mi vida ya no tiene sentido?

David nos explica que la felicidad se puede graficar como una “U” donde el punto más alto lo encontramos en la infancia, esta hermosa etapa donde generalmente no existen las preocupaciones y los niños simplemente se dedican a jugar sin pensar en las consecuencias negativas de un futuro.

A medida que vamos envejeciendo esta escala de la felicidad comienza a ir en descenso, encontrando su punto más bajo a la edad de 47 años, aunque las causas pueden variar según la persona, en general esto se explica porque esta es la edad donde los adultos comienzan a entrar a su periodo de vejez.

Después de ver perdida su juventud, es normal comenzar a decaer anímicamente, pero tranquila, pues Blanchflower también comenta que una vez se ha llegado al punto más bajo de la felicidad solo resta volver a subir, por lo que es importante recordar que al final de una tormenta siempre vuelve el sol.

Ahora que ya conoces cuál es la etapa más triste de la vida según la ciencia, solo debes prepararte realizando algunas actividades que te ayuden a aumentar los niveles de serotonina, como por ejemplo hacer ejercicio, meditar o conocer nuevas personas.