Cactus piedra, la hermosa planta para principiantes que requiere de pocos cuidados

El cactus piedra forma parte de las plantas que necesitan pocos cuidados y, aunque algunas personas optan por alejarse de ella, hay quienes la prefieren no sólo por lo fácil que es tenerla sino por su singular belleza que da un toque único a tu hogar o jardín, pues la puedes colocar en cualquier parte.

Si eres principiante en esto de la jardinería y el cuidado de las plantas, el cactus piedra es la opción ideal para entrenarte y adentrarte a este mágico y natural mundo, especialmente si te gusta lo extraño y poco convencional, aunque te aseguramos que después tus conocidos van a querer copiarte.

¿Qué es cactus piedra?

Existe una gran variedad de cactus y suculentas que se caracterizan por su gran capacidad de adaptabilidad a cualquier ambiente, así como por ser de las plantas más sencillas de mantener vivas. Pero eso no quita que sean aburridas, cada una tiene su belleza peculiar, como es el caso del cactus piedra, considerada como una de las más extrañas.

Y es que tal como lo dice su nombre, este tipo de cactus parece una roca porque normalmente no tiene hojas ni flores que crezcan de su tallo, sólo es este y es muy grueso, por lo que coloquialmente también se le conoce como “piedra viva”. Sin embargo, algo que destaca de esta planta es que el tallo puede tener varios colores en la parte de arriba y todos estos pequeños troncos están cortados por la mitad en la parte de arriba.

Cabe mencionar que esta planta, que recibe el nombre científico de Lithops spp, proviene del desierto de Namibia y la provincia del Cabo, en Suráfrica. En los mercados de plantas es fácil de conseguir y los puedes encontrar de todos los tamaños posibles. Asimismo, si llega a dar una flor, esta es similar a una margarita de color amarilla o blanca.

¿Cómo cuidar el cactus piedra?

Se aconseja colocar el cactus piedra en exteriores para que pueda recibir los rayos de sol como cualquier otro cactus o suculenta, pues existen posibilidades de que la lluvia y los climas muy fríos la sequen. Asimismo, es importante regarla cada semana si se encuentra en un sitio fresco o cada tres días si está en exterior, pero lo mejor es que te cerciores tocando la tierra con el fin de que sientas qué tan húmeda o seca está. ¿Te gustaría tener una piedra viviente como adorno en tu casa?