¿Sabías que cada color en la ofrenda de Día de Muertos tiene un significado especial? Así es, ya sea en decoración, cada ornamento cuenta con un color especia que puede ser el naranja vibrante del cempasúchil o el morado profundo del papel picado, cada elemento en esta celebración honra a quienes ya partieron y nos conecta con nuestras tradiciones. Cada año, miles de personas en México y el mundo arman sus ofrendas de Día de Muertos con cariño y respeto, pero no siempre sabemos lo que representa cada color. En esta guía te cuento todo sobre los colores más comunes en las ofrendas y su significado místico para que armes la tuya con todo el conocimiento y la intención adecuada. El Día de Muertos es una celebración en la que se cree que las almas de los seres queridos regresan al mundo de los vivos para visitarnos. Las ofrendas de Día de Muertos son el corazón de esta fiesta y son tan únicas como las familias que las crean. La idea es colocar objetos, alimentos y, por supuesto, los colores favoritos de nuestros seres queridos para guiarlos de regreso a casa. Cada color en la ofrenda tiene un propósito y una energía especial, que conecta tanto con las creencias prehispánicas como con las tradiciones católicas que se fusionaron para crear el Día de Muertos tal como lo conocemos hoy. Naranja Naranja es, sin duda, el color estrella de la ofrenda, y su conexión con las almas es fascinante. Se cree que el naranja es el único color que los muertos pueden ver claramente en su camino de regreso. Por eso, usamos pétalos de cempasúchil, esa flor icónica de Día de Muertos, para hacer caminos que guíen a los difuntos hasta sus familias. Este color también simbolizaba el luto en las antiguas culturas mesoamericanas, y se ve reflejado en frutas típicas de la temporada como tejocotes, mandarinas y en el papel picado. Morado El morado en la ofrenda representa la solemnidad y la transición. Este color tiene un profundo simbolismo religioso: en el catolicismo, el morado se asocia con el luto y la espera, un tiempo de reflexión y respeto hacia aquellos que se han ido. En la ofrenda, este color aparece en el papel picado y las flores de terciopelo. Es un tono que no puede faltar si quieres que tu ofrenda esté llena de respeto y espiritualidad. Negro Aunque el negro no es un color alegre, es una presencia constante en la ofrenda. Se utiliza para representar el luto y el inframundo. Aunque la celebración de Día de Muertos es alegre, el negro aparece en detalles como la ceniza, en algunas calaveritas de azúcar, y en la vestimenta de figuras tradicionales como la Catrina. Así, este color le da profundidad y simbolismo a la ofrenda. Blanco El blanco simboliza la pureza y la esperanza, representando el cielo y la paz que se desea para las almas de nuestros seres queridos. El blanco aparece en manteles, veladoras y las clásicas calaveritas de azúcar, que son parte esencial de esta fiesta. Este color invita a que la luz y la paz guíen a las almas y les brinden tranquilidad en su visita. Cada elemento y color de la ofrenda de Día de Muertos cuenta una historia de amor, de respeto y de recuerdo. Entender su simbolismo nos permite crear una ofrenda aún más significativa y conectar con nuestras raíces de una manera especial. Así que la próxima vez que veas el naranja del cempasúchil o el morado del papel picado, recuerda que estos colores están ahí para recibir con amor a quienes vienen del más allá.