Panorama Web Mx > panorama social

Cuesta de agosto: Tips para salir de la depresión post-vacaciones

¿Te sientes abrumado, ansioso o melancólico con el fin de las vacaciones? ¿Sientes presión de que hay muchas cosas que hacer y que organizar? ¡No estás solo!

Cuesta de agosto: Tips para salir de la depresión post-vacaciones
Pocos hablan de la cuesta de agosto, pero no eres la única persona en tener esta sensación de melancolía.

Compartir este artículo

Facebook
Twitter
WhatsApp
Email

Es común escuchar de la cuesta de enero cada año, refiriéndose a ese periodo de dificultad financiera que muchas personas experimentan después de las fiestas navideñas y de las vacaciones de fin de año. También se asocia con la primera nómina del año y el intento de recuperarse de los excesos de gastos de diciembre.

La cuesta de agosto por un lado hace referencia al periodo de dificultad financiera que se puede llegar a experimentar en este mes debido a los gastos de vacaciones de verano, el regreso a clases con todo lo que implica: compra de útiles, uniformes, etcétera, y también los pagos extras.

Aunque es una situación temporal, ambas situaciones generan estrés financiero, psicológico y moral.

Publicidad

article image
La cuesta de agosto puede generar estrés también por los gastos durante las vacaciones de verano.

Cómo superar la cuesta de agosto

Sé que muchas mamás están felices de que ya los niños regresen a clases, a veces eso puede generar estrés, pero el regreso a la rutina, a saber, que no hay otro descanso largo hasta diciembre, a que otra vez estamos atados al reloj, a las clases, a las citas y al calendario, puede darnos un bajón terrible.

A mí en lo personal lo que me provoca, ahora que ya no tengo hijos pequeños, es la perdida de la conexión. Con la edad es lógico que los hijos tengan sus actividades, trabajo, ocupaciones y aunado a las nuestras es difícil a veces encontrar esos momentos para encontrarnos. En vacaciones, aunque sigamos trabajando, los horarios no son tan estrictos, no hay tráficos locos y por lo tanto es más fácil vernos y sucede que convivimos mucho más, tenemos esa flexibilidad y paz de no tener prisa y de estar realmente presentes. Para mí el estar con toda mi familia junta en un solo lugar, aunque sea unos días, representa mi mayor capricho. Esa es mi personal cuesta de agosto.

article image
Estar de vacaciones con la familia es un tiempo de felicidad y paz que podemos ver con añoranza.

Este verano además tuvimos las olimpiadas, que, aunque no seamos fanáticos de los deportes, a la mayoría nos gusta ver, nos hace también reunirnos en familia o con amigos. Fue mucha expectativa, y de pronto ya terminó también.

Publicidad

Aunado a todos los gastos extras existe este sentimiento de tristeza, desmotivación o ansiedad que genera el fin de vacaciones. Puede ser un desafío reponerse y adaptarse rápidamente por lo que es importante aceptar y reconocer estos sentimientos sin juzgarnos. La transición del descanso a la rutina puede ser difícil, pero hay que entender que es normal sentir melancolía. Ayuda el regresar a establecer rutinas, hábitos saludables para tener una sensación de control sobre lo que está sucediendo. Poner horarios ayuda también, para las comidas, dormir y hacer ejercicio para ir reestableciendo la estabilidad.

Por otro lado, se acabaron las vacaciones, ¡no la vida! Haz planes con amigos y familia. Dedica tiempo a lo que te gusta hacer, date un paseo o medita. Y sobre todo no olvides la conexión social, a veces no le damos la importancia necesaria y es una medicina para el alma.

article image
Encuentra un momento para ti y para disfrutar, no pierdas la conexión social.

Temas relacionados

author

Brenda Jaet

Publicidad