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Miss Universo: ¿El certamen de belleza sigue siendo necesario hoy día?

¿Siguen siendo relevantes los certámenes de belleza?

Miss Universo: ¿El certamen de belleza sigue siendo necesario hoy día?
Ser la mujer más hermosa del mundo era el máximo aspiracional, pero ¿ahora sigue siendo así?

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Cuando yo era pequeña recuerdo esperar con ansia ver Miss Universo. Ese día mis papás me dejaban dormirme más tarde. Nos sentábamos todos en el estudio de la televisión a ver el certamen de belleza más importante. Yo veía a las concursantes como unas verdaderas diosas. Después replicaba con mis amigas el certamen y poníamos de jueces a mis hermanos y papás. Era el sueño de casi todas las niñas. Ser la mujer más hermosa del mundo… ¡Wow! ¿Qué se sentiría ser ella? ¿Qué más podían necesitar estas mujeres? ¡Ya lo tenían todo! ¿O no?

Así era la educación en los 70 y 80s mi querido lector. En donde la belleza en la mujer era un deber ser. Si no eras bella, no existías. Y ese peligroso mensaje era el que se nos inculcaba, no nada más en casa, lo leíamos, lo veíamos, lo respirábamos. No importaba que pasara, si eras bella todo salía bien al final como en las telenovelas. Más los mil atributos que se le otorgaban a las bellas. Las bellas son buenas, lindas, inteligentes, buenas hijas, hermanas, esposas, todo mundo las quiere, venera y adora, además son caritativas, dulces y jóvenes por siempre. Las malas son feas, mal humoradas, no tienen amigos, no tienen pareja, nadie las quiere.

Hoy 2024, que confusión para nuestra generación. ¡Todas las reglas han cambiado!

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Poco a poco y gracias a muchos movimientos feministas estos estándares inalcanzables han cambiado. Hasta el punto de que los certámenes de belleza han perdido relevancia drásticamente. Solo hay que preguntarles a generaciones nacidas de 2000 para adelante si saben lo que es Miss Universo o si lo ven, y más importante aún, si están interesadas en participar. ¿Qué tan importante para ellas sería ser nombrada la mujer más bella del mundo?

Con todas estas preguntas en mente conocí a una mujer encantadora, hermosa, inteligente, mamá de tres, divorciada, con una carrera y activista social. Una mujer de 40 años. Ella es Zya Barceló. Ella va a participar en el certamen Miss Universo México 2024 y si es elegida será la candidata para representar a México en Miss Universo Mundial.

Sí mi querido lector, leíste bien: 40 años, tres hijos y divorciada. Las reglas de estos certámenes estrictamente eran que las concursantes debían tener entre 18 y 28 años al momento de la inscripción, que no estén casadas ni con hijos, tengan medidas perfectas de 90-60-90 y altura mínima de 1.72. ¿Entonces ahora qué pasó?

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El certamen ha tenido que evolucionar con los tiempos. Cambió de dirección y con ello las reglas. Ahora no hay límite de edad, solamente debes haber cumplido los 18 años para poder participar. Mujeres casadas, divorciadas, con hijos o embarazadas pueden participar. Pueden participar mujeres de la comunidad trans.

Hablando con ella que la motivó a estas alturas de su vida a querer entrar en esto, Zya me platica que a lo largo de su vida el modelaje la ha acompañado. Mientras estudiaba, mientras estaba embarazada, mientras sus hijos eran pequeños, pero que nunca lo tomó como una carrera en serio. Y ni siquiera sabía que podría entrar en este certamen hasta que su amiga y ex directora del certamen Martha Cristiana la invitó a participar. Vio en ello la forma de seguir su activismo social y de darle voz a las mujeres de su edad, para pasar el mensaje que la belleza no tiene edad y que somos más que solo una cara y un cuerpo bonito. Ella busca el éxito en este certamen para tener una plataforma que amplifique su voz y pueda alcanzar a muchas más personas.

¿Quién está en desventaja con quién? ¿La mujer que nunca ha tenido hijos, que es más joven y por lo tanto la piel y el tono muscular es otro, o la mujer madura que tiene mucha más experiencia y otra visión del mundo?

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Brenda Jaet

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