EQUALITY ON DEMAND: Los finales tan solo son nuevos inicios

Por

Michelle Ferrari

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Publicado: 2/1/2025 · 2:52 a.m. MX | Actualizado: 2/1/2025 · 2:52 a.m. MX

Este 2024 cierra un ciclo lleno de reflexiones y aprendizajes. Al mirar atrás, me

invade un sentimiento de gratitud hacia cada una de ustedes: mujeres que

trabajan, que emprenden, que lideran, que cuidan, que sueñan. Cada paso que

dieron este año, por pequeño que pareciera, ha sido un gran salto colectivo

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hacia la equidad y la inclusión. Nadie dijo que sería sencillo, pero ustedes han

demostrado que la determinación, la creatividad y la unión pueden derribar

barreras que antes parecían imposibles de mover.

También quiero dirigirme, en esta última reflexión del 2024, a los hombres que

leen estas líneas. Gracias por su compromiso y por sumarse a este viaje.

Ustedes son compañeros de transformación que apuestan por romper

paradigmas y crear un presente más justo para todas y para todos. Cada mano

que se tiende es un impulso hacia culturas organizacionales más diversas,

entornos de innovación más audaces y, por supuesto, una vida laboral y

personal más saludable.

Hemos cultivado culturas organizacionales más incluyentes, fomentado la

innovación como motor de crecimiento y priorizado la salud física y emocional

de nuestros equipos. Y aunque celebramos con orgullo estos avances,

sabemos que aún hay camino por recorrer. Precisamente por eso, en esta

época de cierres y nuevos comienzos, vale la pena recordar que el éxito es una

construcción diaria que cobra sentido cuando se comparte.

Sin embargo, más allá de los logros y retos que nos han llevado a crecer de

manera profesional, estas fechas también son un recordatorio del privilegio de

compartir y celebrar con quienes más queremos. Al ponerle pausa al ajetreo

diario, nos damos la oportunidad de agradecer todo lo bueno que hemos vivido

y reconocer aquello que nos impulsa a seguir adelante.

Por ahora, es momento de celebrar lo que vivimos. Nunca olvidemos la

importancia de celebrar, porque cuando lo hacemos, le enviamos un mensaje

claro a la vida: “Esto me gusta, dame más de esto, por favor”.

Al mismo tiempo, las y los invito a pre-celebrar. ¿Qué significa? Sentir la

emoción de las metas cumplidas antes de que sucedan. Es decir, experimentar

felicidad y gratitud por algo que aún no ha pasado, pero que tienes la certeza de

que pasará. En otras palabras, abrirle la puerta a la ilusión y al optimismo para

encaminar nuestros sueños, proyectos y metas del 2025.

Recordemos que, más allá de los objetivos laborales, en estas fechas de cierre

de año tenemos la oportunidad de valorar lo fundamental: el abrazo de nuestros

seres queridos, la alegría de compartir sueños en familia y el simple acto de

detenernos a celebrar. Navidad y Año Nuevo nos recuerdan que la vida no solo

se trata de metas y retos profesionales; también es calidez, ternura y reconexión

con lo que realmente importa. Este momento de fiesta y gratitud nos ofrece la

pausa necesaria para recargar energías y renovar compromisos.

Las y los invito a que, entre reuniones familiares y propósitos de Año Nuevo, se

regalen tiempo para soñar en grande. Piensen en lo que anhelan construir en

2025, en las alianzas que quieren forjar y en los cambios que desean impulsar,

tanto en sus empresas como en sus comunidades. Tengamos la valentía de

imaginar entornos más amables, más seguros y más creativos, donde el talento

femenino sea valorado en igualdad de condiciones y donde los hombres

continúen siendo nuestros cómplices incondicionales para el progreso.

Recordemos que “los finales son nuevos inicios”: cada logro, cada proyecto y

cada aprendizaje se convierte en el cimiento del camino que aún nos queda por

recorrer. Y de nuevo ¡gracias!, gracias por creer en la fuerza colectiva de la

sororidad y por acompañarnos en esta senda de crecimiento.

El Women Economic Forum vive de sus historias, de sus logros y, sobre todo,

de su valentía para unir esfuerzos. Ustedes son inspiración y ejemplo de que sí

se puede hacer historia cuando nos juntamos para avanzar.

A mi equipo, mis aliadas y aliados, mis socios y cómplices: gracias por

inspirarme y motivarme a creer, un año más, en el poder de la sororidad, la

empatía y la innovación. Sigamos abrazando la salud integral y el bienestar

colectivo como motores indispensables de cualquier progreso, sin olvidar que la

chispa creativa que nos une puede iluminar nuestro rumbo hacia un futuro más

equitativo y próspero.

Les deseo un cierre de año lleno de paz y un 2025 cargado de éxitos y

propósitos cumplidos.

¡Felices fiestas y gracias por hacer de cada final un espléndido nuevo comienzo!

Con afecto y profunda admiración,

Mich Ferrari

Michelle Ferrari