Ricardo Arjona: De la pausa obligada al renacer musical con canciones que sanan

Ricardo Arjona ha marcado a más de una generación con su música. Hoy, a días de cumplir 61 años, y después de un tiempo en el que tuvo que priorizar su salud, regresa a la música y a los escenarios con Seco, un álbum lleno de emociones y por supuesto, fiel a su esencia.

El originario de Guatemala se ha convertido en un referente dentro de la industria de la música latina. Desde un lugar sincero y vulnerable, nos abre su corazón a través de sus letras y canciones, y nos habla de la nueva etapa en la que se encuentra actualmente.

Para Arjona mantenerse fiel a sí mismo ha sido algo primordial a lo largo de su larga y exitosa trayectoria. Después de su tour Blanco y Negro, debido a unos problemas de salud en la columna, se vio obligado a tomar una pausa en su carrera, lo que lo llevo a crear nuevos temas y llegar a este 2025 con más fuerza que antes. Mañana, 17 de enero, se estrenará Seco, un álbum que cuenta con 12 canciones de las cuales ya pudimos escuchar tres: “Despacito que hay prisa”, “Todo termina” y “Nirvana”. “Seco es un nombre raro, en Guatemala es flaco, que es como me dijeron siempre”, aseguró el cantautor sobre el título de este lanzamiento, y a lo que agregó es una manera de regresar al pasado, “se me juntaron muchas cosas, desde el final de la gira, que la termine con seis infiltraciones en la columna, hecho pedazos, muy medicado, hasta la doble cirugía en Barcelona, se me vinieron muchas cosas a la cabeza. Eso te hace realizar un ejercicio que tiene que ver con el pasado, que para el autor fue fantástico, porque el autor se vitaliza del sufrimiento muchas veces. Toda la vitalidad que adquiere va para canciones que son emocionalmente más poderosas que las canciones que haces cuando estás feliz. Hacen que él se la pase increíble, pero que él otro esté jodido como nunca. A mí me tocó estar jodido como nunca mientras escribía este disco. Lo irónico de este caso es que cuando escuchas el resultado de las cosas que escribiste, te hace sentir mucho mejor, que es donde estoy ahora. Seco tiene que ver mucho con mi pasado, con mi vida, con lo que soy”, confesó sobre este camino.

Y agregó que, “cuando escribí ‘Todo termina’ yo sabía que tenía un disco importante, por lo menos en el mundo y en el universo mío”, añadiendo que dentro de él, “vuelve a aparecer esta bipolaridad en el autor que llevo dentro, de escribir ‘Todo termina’ y de escribir ‘Despacio que hay prisa’. Ambos autores parecieran distintos, pero a la hora de estudiarlos, yo a la hora de ponerlos en un plano frontal, descubro que es uno relajándose y otro oscureciéndose, pero que son la misma persona”.

Asimismo, confesó que “Nirvana” es una canción que ve al amor desde otra perspectiva. “Al amor no hay que ponerle barreras, límites o colgarle medallas, porque se asusta”, aseguró

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Arjona sobre este tema

Mañana nos tiene una sorpresa con su nuevo videoclip, en el cual además debuta como director. “Mujer” es el título de esta canción en la que la protagonista del video es su hija, la actriz Adria Arjona. “Es un tema tan complicado. El mundo en el que vivimos hoy es de muchos movimientos y muchas banderas, poca convicción, poco fundamento”, compartió el artista.

Al hablar del crecimiento que ha adquirido la música latina Arjona mencionó que está en su mejor momento en cuanto a popularidad, “no sé si en cuanto a calidad, y no lo digo con este rencor que se ha vuelto muy popular, porque el reggaetón ha logrado sin duda, lo que no logró ninguna música latinoamericana en el pasado a nivel masivo, y esto debe ser respetado, porque se lo ganaron bien. Yo no tengo nada en contra, todo lo contrario, hay un respeto y una admiración. No respeto tanto a los que tratan de pegarse para lograr sacar la cabecita, eso me parece un poco falto de dignidad, pero cada quien decide hacer con su carrera y su vida y lo que quiera”. Por su lado, Ricardo prefiere mantenerse alejado de este tipo de colaboraciones y ser fiel a su ADN. “La última vez que me ofrecieron hacer un dueto con el reggaetón, contesté, por WhatsApp, ‘permíteme permanecer inmune’. Pero no es por un asunto de distancia, porque a veces podría antojarse intentar algo en ese sentido, pero me parece un poco extraño sumarse de una manera tan descarada a algo que tiene un éxito tan grande”, aseguró.

UNA NUEVA ETAPA

El 19 de enero, Ricardo Arjona cumple 61 años, y sobre este momento en su vida nos confiesa, “hoy me siento en un momento de inmensa plenitud en mi vida porque ya no le exijo prácticamente nada a nadie, ojo me he vuelto un poco egoísta sí. Alguien me dijo alguna vez que las edades, y más cuando empiezas a entrar en otro tipo de edades, sirven para ir aprendiendo a ser más egoísta. Yo sigo teniendo mi entorno cercano y lo adoro, estoy tan cómodo ahí, me cuesta tanto salir, cuando salgo a la calle sobrevivo, pero ya no le exijo a la gente”.

Sobre si es feliz hoy, el artista nos deja una poderosa reflexión, “una buena mañana, esto es cierto, me desperté sin entender nada. Prendí la tele, no entendí nada, puse un programa familiar, no entendí nada de lo que pasaba, ni el noticiero ni el programa me gustaban. Ya me había pasado, estar en conflicto con la mayoría de las cosas que me pasaban o que pasaban alrededor mío, de tanto no entender nada empecé a entenderlo todo. La felicidad son esos golpecitos que vienen de vez en cuando y que te ayudan para poder solventar el montón de golpesotes que vienen casi siempre. Pero no entender nada, sin preferencias, te lleva a un estado de plenitud, porque después no le exiges nada a nadie. Yo hoy no entiendo nada, si me preguntas de lo que pasa en el mundo hoy, no tengo la respuesta, y yo tengo la clara certeza de que el que está mal soy yo, ya no le echo la culpa a nadie. Por lo tanto, decirte que soy feliz es muy atrevido, pero decirte no entiendo nada como un síntoma de plenitud creo que es lo mejor que me puede pasar”.

Con cuatro décadas de trayectoria en la música, hoy el sueño de Ricardo es, “trabajar en un bar. Voy a hacer una gira grande lo más seguro es que sí, pero mi sueño hoy, de los próximos meses, es trabajar en un bar pequeño”.