Alberto de Mónaco reitera que Charlene no tiene cáncer o Covid-19, su malestar no es solo físico

Cansado de los rumores que rodean su matrimonio, el príncipe Alberto de Mónaco ha vuelto a salir ante la prensa para hablar de la salud y el distanciamiento de la princesa Charlene. Asegurando firmemente que su esposa no se ha marchado del principado por problemas maritales; sino en pro de su bienestar mental y físico.

El soberano de Mónaco habló de los problemas que enfrenta su esposa con los medios, confesó que Charlene no padece una enfermedad como el cáncer o coronavirus, del mismo modo aseguró que la princesa tampoco se ha sometido a ninguna cirugía estética como se ha especulado.

La princesa Charlene no tinen cáncer o coronavirus

"Como sé que hay rumores por ahí, dejadme decir que esto no es covid, no tiene relación con el cáncer y, si quieres hablar de más especulaciones, no tiene relación con la cirugía estética ni con un 'trabajo' en la cara", dijo Alberto a People.

El soberano de Mónaco ha confirmado en entrevistas pasadas que las dolencias de su esposa no son solo físicas, dejando entrever que presenta problemas de salud mental.

“Está mejor, pero todavía necesita descanso y paz. Hay fatiga, no solo física, que solo se puede tratar con un período de descanso y seguimiento”, mencionó el príncipe sobre su mujer.

Charlene recibe tratamiento fuera de casa

Por lo que Alberto se ha sentado con la familia de la princesa para hablar sobre el tipo de tratamiento que debe tomar, también indicó que Charlene esta siendo atendida fuera del principado en algún lugar de Europa.

"Me senté con sus hermanos y su cuñada. Ella ya había tomado la decisión y solo queríamos que nos lo confirmara con nosotros delante. Ella quería esto. Sabe que lo mejor es descansar en el marco de un tratamiento médico. Y no en Mónaco. Por razones privadas, debió ser en algún lugar fuera de Mónaco, por cuestiones de privacidad", reveló.

Alberto II también hizo hincapié en que la ausencia de su mujer no tiene que ver con problemas maritales, por lo que, no hay un divorcio real en puerta.

"Posiblemente lo voy a decir esto varias veces, pero esto no tiene nada que ver con nuestra relación. Quiero dejarlo muy claro. Esto no es un problema de nuestra relación, de una relación entre un marido y su mujer. Es de diferente naturaleza", subrayó.

Lo cierto es que el deterioro de la princesa es visiblemente notorio, su extrema delgadez y lo marcado de sus pómulos son muestra de lo mal que lo está pasando. Sumado a esto, la ausencia de sus hijos podría ser devastador para la princesa.