La razón por la que Camilla Parker casi deja plantado a Carlos III en el altar

¡Por poco y Camilla Parker no sería la actual reina consorte!

Camilla Parker se ha convertido en la nueva reina consorte de Reino Unido al haber muerto la reina Isabel II, pero hubo un momento en el que el miedo la paralizó y estuvo a punto de dejar plantado a Carlos III en el altar, pues durante un tiempo se enfrentó a una dura crítica social, que la asechaba hasta en el supermercado.

Camilla entró en pánico antes de casarse con el rey Carlos III

Angela Levin cuenta entre las páginas de su libro “Camilla: From Outcast to Queen Consort” que el día de su boda con el rey Carlos, el 9 de abril del 2005, Camilla Parker sufrió un terrible ataque de pánico que por poco provoca que dejara a su prometido plantado en el altar.

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Camilla no superaba las críticas y comentarios en su contra

La experta en realeza explica que después de la muerte de Diana Spencer a Camilla se le vio como una de las grandes villanas de la monarquía, por lo que, se volvió blanco de agresiones por parte del público y la prensa.

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“No creo que muchas mujeres hayan pasado por lo que ella pasó. Venir de un hogar feliz con muchos amigos a ser villanizada y ser llamada la mujer más horrible”, reveló Levin en un programa de televisión. “La gente se aglomeraba a su alrededor si iba al supermercado, tirándole cosas”, añadió.

La reina consorte estuvo a punto de dejar plantado al novio en el altar

Así que el día de su boda tuvo miedo de que el resto de su vida viviera bajo la sombra de Lady Di pagando por su amorío con Carlos III. “Se negó a levantarse de la cama la mañana del día de la boda. Simplemente no podía manejarlo. Es una mujer fuerte, pero eso simplemente fue demasiado”, explicó Angela.

Sin embargo, parece que el amor que Camilla Parker siente por su marido es más fuerte que cualquier otra cosa, porque como pudo, cobró fuerzas para levantarse ese 9 de abril y presentarse en la ceremonia civil en Windsor Guildhall y al servicio religioso en la Capilla de San Jorge y darle el sí, aceptó frente a todos a Carlos III.

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